Puig de n'Alí (1.037 m.)

Como ya es tradición cada sábado, ayer una nueva escapada por la montaña, esta vez acompañado por el panzergruppenfhürer Julio y el sherpa Jhonny. Fue uno de esos días que disfrutas pero te quedas con un poco de mal sabor de boca porque el tiempo no nos acompañó; diez minutos antes de llegar a la cima nos alcanzaron las nubes y en vez de disfrutar de las magníficas vistas sobre el pla de Mallorca que te ofrece el Puig de n'Alí nos tuvimos que conformar con la satisfacción de haber superado el pedazo de montañón sin poder ver a diez metros de tu napia.

Aun así nos sirvió para aprender la diferencia entre bajarte una ruta de un blog de senderistas y hacerlo de otro de alpinistas, y que cuando en uno de estos pone "pendiente fuerte / muy fuerte" significa que delante tienes una pared de agarrate y no te menees. En dos horas y cuarto pasamos desde los 360 metros del merendero donde dejamos el coche, en la carretera de Inca a Lluch, a la cima de la montaña, lo que supone un desnivel de 670 metros subidos por la ruta más directa posible, atravesando el Comellar de s'Homo y la Comuna de Caimari en un recorrido que en vez de hacer las habituales voltas iba directo hacia arriba fita tras fita. Si además le sumas que la cabra loca de Juan iba en cabeza y que no se cansa nunca, hubo momentos en que tuve que parar con la escusa de sacar cuatro fotos pero en realidad estaba viendo "ballumes", además de jurar en areameo antiguo que nunca más volvía a fumar.

Mapa del recorrido.

 Salida desde es portell hacia es Comellar des Horts.

Llevamos una horita subiendo y parece que el sol va a aguantar todo el día. Aquí todavía estamos con las fuerzas intactas y se posa con pinta marcial para quedar bien en la foto.

Un rato más arriba, por la derecha se ven las nubes que empezaban a llegar empujadas por el xaloc. Delante está el Puig Caragoler des Guix, de 913 metros. Mi gps no es tan sofisticado, pero calculamos que durante una hora la pendiente media no baja del 30 - 35 %.

El subteniente Patenko ya recuperado de su corta visita al más allá.

La nubes ya empezaban a hacer acto de presencia y el Pla ya no se aprecia. Parece que estamos en algunos de los picos más altos del mundo.

La última panorámica mínimamente decente que pude sacar. Delante está el Puig de sa Fita, de 894 metros, que continua a través de Sa Carena que separa el Comellar del Bosc de la vertiente sur de la Sierra de Tramuntana. A la derecha entre las nubes está el Puig de Ses Bassetes y más a la derecha se tocaría ver el Massanella, pero na de na.

Ya cerca de la cima, pasamos por un "fantasmagórico" bosque.

El Massanella que ya empieza a taparse.

El blogger aguantando...

... a los otros dos que no se percatan de los que tengo que aguantar.

El trío calavera que "gosó" subir al Alí. Desafío superado! Como buen entendido en tecnología, Juan encuentra en mi cámara la función para hacerte la foto con temporizador, le coloca un trípode y ponemos cara de "tampoco no es para tanto" aunque la procesión va por dentro.

Atención!!! parejitas: habitación con vistas despejadas y sin vecinos, perfecto para pasar una noche muy romántica... si la consigues subir hasta aquí.
PD.: si sois muy fogosos, cuidado con el pedrolo que hace de techo ya que da un poco de mal rollo.

La cumbre de la montaña es un caos de rocas peladas donde nos comemos los bocatas y dejamos nuestra dedicatoria en el libro de cima que encontramos debajo de una piedra mientras me estoy cagando en las p... nubes que no me dejan sacar fotos decentes. La niebla ya empieza cubrir la cima.

Y que decir de los amigos que hicimos, envidia nos daban que no paraban de... Y claro, después la palman. 

Bajamos por el lado contrario hasta el Coll de Mancor o de Sa Línia (el nombre viene de que por aquí se instaló el primer tendido del telégrafo que conectaba Palma con Lluch a finales del siglo XIX) y volvemos a cruzar la cresta siguiendo el Torrent de sa Coveta Negra. A nuestra izquierda queda el Puig des Grau, de 867 metros, que teníamos previsto escalar pero como subir para no ver nada es de torpes, decidimos por unanimidad que se quede para otro día.